Esta es la balada de la muchacha pródiga de sí misma
que alegre y detonante de colores
hace el saludo de su sonrisa de-mi-querido-amor
a los que la tutean con palabras de esposo
Hombres que nunca ha visto
solemnemente rústicos o con rústicas bromas.
Ellos saben y la buscan golosamente
desnudando sus caderas blancas en la oscuridad
Una muchacha hecha para un ramo de flores
una chica galante dispuesta a todo y por todos
La que amaba demasiado pronto y con-todo-su-cuerpo
y por ello mal comprendida fue.
La muchacha
la muchacha-de-la-pollera-pronta
hacia mí la ola de su pollera despliega…
Sucedió como suele sobre los pastos haraganes
cuando el sol era el sol y el calor el calor
La boca abierta hacia las gordas nubes fofas del verano
y la pollera sobre la cara como un jardín cubriéndola.
De soslayo con la comisura de sus labios miraba
cuando el pequeño amigo favorito para el placer
la solicitaba con voz ahogada embarullándose…
y algo espumeante y feliz le sube a la cara
y se le arrebola
como si él le hiciese cosquillas con una ramita verde.
Jóvenes y viejos se metían entre sus sábanas
para tener su mundo en paz
Contentos cerca de ella
con una carga de caricias
o con una sonrisa idiota
antes de abrazar su maravilla.
La muchacha…
la muchacha engendra oleajes se vuelve playa
y su pollera canta como las olas!
El día era perezoso y la noche activa
Venían de uno en uno
o todos a la vez
Le formaban una «guardia de corps»
y se envolvían en su sonrisa
Su corazón era un albergue
abierto para una noche.
Y como si fuera su corazoncito un nido recién hecho
los más rayados los más bochincheros
llegaban piando: «Dádnos amor dádnos amor».
Comprobando con fatiga la buena ley del metal
la muchacha-del-corazón-pronto
la muchacha-de-la-pollera-pronta
tiende sus brazos desnudos…
Ella extiende su cuerpo con ademanes calmosos
en el día en la noche
para todos para cada uno
se abre se da vuelta se muestra
con ingenua sapiencia
y lo que se ve es hermoso es extrañamente agradable
y al hacer todas estas cosas ella será «ella».
Y así cuando escucho en algún lugar
palabra que alguien masculla al pasar
a otra muchacha de corazón también henchido
Mis pensamientos rápido son
para esta muchacha de la pollera-pronta
atenta a la vida con un buen sentido
que para ofrecer sólo tenía
aquella llama exacta
un fuego para calentar la vida
un fuego para vivir mejor.
La muchacha
la muchacha-de-la-pollera-pronta
viene hacia mí moviéndose con pausa de hoja…
¡Muchachas ídos todas!
con la llama que calienta la sangre y abrillanta los ojos
el invierno está aquí afuera está aquí en mí
Pero esta noche antes de los somníferos
dejad que avance la imagen de la muchacha-de-la-pollera-pronta
cada vez más lenta
cada vez más oleante
necesito de todos sus pujantes recuerdos…!
La muchacha
la muchacha de la pollera pronta
y su playa-su-playa-su-playa por todas partes…