El alma vieja, amada, quieres que sea como las flores del verano
durante el invierno los pájaros están encerrados en sus jaulas
Te quiero como espera la colina el cuerpo del valle
o como la tierra espera la lluvia espesa y fértil
Te espero en todos los atardeceres en la ventana, deshilando abalorios
colocando los libros, leyendo mis versos
Y ahora me alegro cuando en el patio ladran los perros ladran los perros
y cuando llegas para quedarte conmigo hasta mañana hasta mañana
Mi alma feliz es como nuestro cuarto cálido
cuando sé que está nevado y las calles se visten de blanco.
Versión de Darie Novácenau
Añadir un comentario