Es la hora más lenta,
es crepúsculo
y un par de relámpagos
destellan un horizonte.
Descalzo, sobre la arena
tibia,
un niño corre tratando
de atrapar gaviotas.
En la noche,
la lluvia borrará las huellas,
iniciará un desierto,
regalará el olvido.
Añadir un comentario