Pon en mi pecho niña, pon tu mano de Heinrich Heine

Pon en mi pecho, niña, pon tu mano.
¿No sientes dentro lúgubre inquietud?
Es que .en el alma llevo un artesano
que se pasa clavando mi ataúd.

Trabaja sin descanso todo el día;
y en la noche trabaja sin cesar;
que acabes pronto, maestro, mi alma ansía,
y me dejes en calma descansar.

Añadir un comentario
Leer la poesía Pon en mi pecho niña, pon tu mano del poeta Heinrich Heine en el sitio Blogpoemas - los mejores poemas hermosos sobre el amor, la naturaleza, la vida, la Patria, para niños y adultos en español de los célebres poetas clásicos.