Ella baila…
Ella baila-
pero con un grave peso-
¿Por qué baila con un grave peso?
Ella estará inconsolable.
Gimiendo muestra a sus amados
desde la profundidad, en el atractivo del mar del mundo
aliento que sopla la inquietud
sobre la armadura salvante de sus brazos.
Mudo se agita un pez sufriente
en su amor-
Pero de repente
en la nuca
la doblega el sueño hacia otro lado-
Libertas
son vida-
son muerte.
Ya quiere lo extremo emigrar
el corazón del agua
y el fuego demoníaca luz admirable
los florecientes nacimientos de la tierra
y aire que cantando abandona el aliento.
Ansiedad es el soberano
el águila invisible
destroza su presa
la lleva a casa-
Versión de Javier Tubía
* * * * *
Noche de noches
La noche fue un ataúd de fuego negro.
Los rojos colores del amén de las oraciones
se dieron allí sepultura.
En esos enraizados dientes de púrpura -Cabellos- y el cuerpo
un árbol sacudido en viento espiritual
oscura visión -este querubín de un día
se encendió.
Las llamas en la red arterial
corrieron hacia su significado.
En las cenizas de resurrección sonó música.
Versión de Javier Tubía
* * * * *
¿Quién llama?
¿Quién llama?
¡La propia voz!
¿Quién responde?
¡Muerte!
¿Se hunde la amistad
en el campamento del sueño?
¡Sí!
¿Por qué no canta ningún gallo?
¡Está esperando a que el beso del romero
nade en el agua ¿!
¿Qué es eso?
¡El instante de abandono
del cual el tiempo se suprime
asesinado de eternidad!
¿Qué es eso?
Sueño y morir no tienen atributos.
Versión de Javier Tubía