Zona de fuego/ la palabra- Primera ola
Detrás de mis ojos luce la ola empecinada en volver.
El mar a tientas, impulso tras impulso
insiste con su murmullo solitario y perfecto.
(extraña el amor)
No sabe decir adiós, siempre regresa.
Primera ola: con el frío de la palabra no dicha
Oigo el silencio corretear en el viento
ojos negros, brillantes, fijos
atrapan los míos, cansados, presentes.
Se pierde la noche dentro de mí
traspasa huesos, penetra
incendia recuerdos
los redime.
Espero.
Un fuego descarna la piel
de mi condena.
Tribunal y sentencia
breve tiempo entre luz vacía
suficiente para saber
del corazón víctima
de los ojos testigos en la noche.
Ya no tengo manos
para sostenerme del silencio.
Caigo.
La vida es una dádiva
gime en soledad
me incorporo
tal vez otros labios toquen el aire
tal vez otra mirada repose
mientras el silencio me devora
y es la noche misma que sucumbe
en mi garganta seca
por detener el grito.