Cuando la forma comienza a declinar aparece el fondo. Se adelgazan las paredes,
se afina la membrana, la noche extensa, sencilla o intrincada de la forma. El fondo
se opaca entonces, comparece.
Hay un instante de atraso, de desfasaje entre la forma y el fondo y es allí donde
se ve su orilla, su materia dispersa, su líquido sin continente. Espesura, densidad
opaca.
Un punto. El punto concentra el fondo, el fondo despojado.
La intemperie como una precipitación en el seno de un líquido, como un cuerpo
extraño. Pero el fondo siempre estuvo en la forma, la pulpa en la fruta, el agua en el
vaso, la carne con sus linfas en el cuerpo. El cuerpo dentro del mundo. El mundo
dentro del cuerpo.
Pues abandonada la forma queda una circularidad, una huella.
Cuando fa forma comienza a declinar, aparece el fondo.